TÍTULO DEL TEMA “LOS DOCE TRABAJOS DE HÉRCULES”.
INTRODUCCIÓN.
Comenzare el presente trabajo describiendo la situación originaria de los doce trabajos de Hércules. La diosa Hera, esposa de Zeus, guiada por su odio, provoca constantemente crisis de locura a Hércules. En una de estas crisis, Hércules mata a su esposa e hijos. Al recuperarse de su locura, arrepentido, Hércules se entrega a su principal enemigo, el rey Euristeo, y se compromete a realizar 10 trabajos imposibles para expiar su culpa. Hércules realiza los 10 trabajos, pero 2 de ellos no le son contabilizados, por lo que realiza 2 trabajos más, dando un total de 12 trabajos, que desarrollo de la siguiente manera:
Los Caballos de Diómedes: Este primer trabajo de Hércules, está conectado con el primer signo del zodíaco: Aries.
El Toro de Creta: Este segundo trabajo de Hércules está conectado con el segundo signo del zodíaco: Tauro.
Las Manzanas de Oro de las Hespérides: Este tercer trabajo está conectado con el tercer signo del zodíaco: Géminis.
La Cierva de Cerinea: Este cuarto trabajo está conectado con el cuarto signo del zodíaco: Cáncer.
El León de Nemea: Este quinto trabajo está conectado con el quinto signo del zodíaco: Leo.
El Cinturón de Hipólita: Este sexto trabajo está conectado con el sexto signo del zodíaco: Virgo.
El Jabalí de Erimanto: Este séptimo trabajo está conectado con el séptimo signo del zodíaco: Libra.
La Hidra de Lerna: El octavo trabajo está conectado con el octavo signo del zodíaco: Escorpio.
Los Pájaros del Lago Estínfalo: El noveno trabajo está conectado con el noveno signo del zodíaco: Sagitario.
El Perro Cerbero: El décimo trabajo está conectado con el décimo signo del zodíaco: Capricornio.
Los Establos de Augías: El undécimo trabajo está conectado con el undécimo signo del zodíaco: Acuario.
El rebaño de Gerión: El duodécimo trabajo está conectado con el duodécimo signo del zodíaco: Piscis.
Haciendo un breve resumen la historia cuenta sobre un iniciado que según los antiguos ritos que veneraban los movimientos solares enseñan la personificación del mesías o ungido que dan unas enseñanzas místicas y son ejemplo de ciertas capacidades más allá de las facultades humanas ordinarias, siempre han existido en diversas culturas y pueblos a través de las eras, en diferentes puntos de espacio y tiempo pero están presentes gracias a los que han conservado el secreto de los antiguos sabios e iniciadores en los misterios del hombre, la naturaleza y la divinidad.
Hércules emblema del sol e hijo de Dios hace una alegoría del transcurso sobre la elíptica de las 12 constelaciones dando una enseñanza iniciática de cómo realizar la apoteosis en el hombre usando las facultades y poderes de los cuales ha sido dotado por el Ser Supremo ya que siendo imagen y semejanza del destello de la divinidad es una de las grandes tareas del hombre y esta historia da una enseñanza alegórica de como regresar al seno del Creador en una forma práctica conservando el secreto de las iniciaciones antiguas para que solo los iniciados meditando y analizando comprendieran realmente lo que simboliza y llegaran a ser verdaderos adeptos.
DESARROLLO DEL TEMA.
TRABAJO No. 1 LA CAPTURA DE LAS YEGUAS DEVORADORAS DE HOMBRES DE DIOMEDES.
Estas yeguas pertenecían al rey Diomedes, de la tribu de los Bistones, “un pueblo tracio muy belicoso.” Tracia, una región que incluía el nordeste de lo que hoy es Grecia, sudeste de Bulgaria y la Turquía europea, era considerada por los antiguos griegos un lugar salvaje, nación de fieros bárbaros. El marcial Diomedes, rey de los Bistones, no en vano era hijo del dios de la guerra Ares o Marte y Cirene, aunque es conocido principalmente por las yeguas devoradoras de hombres de las que era dueño.
Diomedes este personaje había entrenado a sus yeguas para comer carne humana, y a cualquier persona que lo contradecía o lo retaba, se lo daba a sus yeguas y estas lo desmembraban hasta matarlo y después se lo comían.
Cuenta la historia que Hércules le arrebató a Diomedes sus yeguas inundando la llanura y ahogando a sus cuidadores, al enterarse Diomedes fue tras él al mando de un ejército , pero Hércules le venció y lo aprisionó y después se lo dio a comer a sus yeguas.
Ya amaestradas las yeguas fueron llevadas a Micenas donde estas fueron regaladas a la Diosa Hera y tiempo después fueron devoradas en el monte Olimpo por las fieras y las alimañas.
Lo que nos explica esta historia es que Diomedes representa el lado oscuro que tenemos todos, al ser hijo de Marte nos explica que Hércules está trabajando con la energía de Aries, y las yeguas son todos los bajos deseos e instintos, pensamientos y palabras equivocadas. Hércules representa nuestra voluntad, así como el mundo de los pensamientos por lo tanto la enseñanza es que si dejamos que nuestros bajos instintos y deseos sean dirigidos por nuestro lado negativo acabaremos primero con las personas a nuestro alrededor y después hasta con uno mismo, pero si como Hércules con nuestra voluntad domáramos estas pasiones y nuestra mente desbocada estas poco a poco irían desapareciendo como las yeguas en el Olimpo.
Desde el punto de vista cósmico, Aries es el signo de la Creación. Es el signo de los comienzos. En la evolución humana, marca el punto en el que se inicia la conciencia subjetiva de la existencia, en comienzo de la senda de la experiencia.
En Aries se inicia el camino en el que se toma forma y se aprende a dominarla. Pero también se inicia el desarrollo interior y el dominio de lo interno sobre lo externo.
Dentro de la masonería en el primer grado con nuestro cincel, mazo y regla vamos puliendo nuestra piedra en bruto, es decir que al igual que Hércules con nuestra voluntad, inteligencia y constancia, vamos corrigiendo nuestros vicios hasta enterrarlos por completo.
no es una tarea fácil, y nunca sale las primeras veces sino con las repeticiones iremos mejorando, pues “ solo NO se equivoca el que no trabaja.” los demás debemos aprender de nuestros errores y tratar de no volver hacerlos pues de eso se trata el perfeccionarse.
Seamos como nuestro Héroe y con nuestra gran fuerza interna que proviene del G.·.A.·.D.·.U.·. Venzamos nuestros vicios e imperfecciones y levantemos grandes construcciones a la virtud.
TRABAJO No. 2 LA CAPTURA DEL TORO DE CRETA.
El toro de creta fue el toro que el dios Poseidón hizo salir del mal cuando el rey Minos prometió ofrecer en sacrificio al dios cualquier cosa que saliera de las olas; pero minos lo encontró tan hermoso que lo incorporó a sus rebaños como semental en vez de sacrificarlo.
Poseidón, enfurecido, hizo que la reina Pasífae se enamorara del animal y concibiera con el un hijo, el Minotauro, tras lo cual hizo enloquecer al toro, convirtiéndolo en un animal salvaje que echaba fuego por las narices.
Hércules se presentó ante Minos, que le envió a capturar al toro, puesto que este estaba destrozando todo lo que encontraba a su paso en la isla de Creta. Hércules logró subir al lomo del animal y conducirlo hasta Micenas a través del mar Egeo. Euristeo, al ver al hermoso toro lo quiso ofrecer a Hera, pero esta lo rechazó porque le recordaba el poder de Hércules por lo que Euristeo lo dejo en libertad. El toro cruzó el istmo de Corinto, causando estragos allá por donde pasaba, hasta que Teseo logró matarlo en la llanura de Maratón, próximo a Atenas.
La consumación del trabajo emprendido en el signo de Tauro, es la glorificación de la materia y la subsiguiente iluminación a través de su medio.
Tauro es una de las constelaciones más interesantes en el zodiaco, en ella se encuentra la estrella fija Aldebaran, que es una de las razones por las que se considera a esta constelación como confiriendo iluminación. Tauro está regido por el planeta Venus, símbolo del amor terrenal y celestial.
En este signo se encuentran Las Pléyades, y entre ellas Alcione, que es el sol central de nuestro universo, al rededor de la cual gira nuestro sol acompañado de sus planetas. Las Pléyades son el símbolo del alma alrededor de la cual gira la rueda de la vida. Tenemos también que recordar que el signo de Tauro es el opuesto de Escorpio, y estos dos signos constituyen el campo de un estupendo esfuerzo por parte de Hércules; pues en uno lucha con el problema del sexo (Escorpio), y en otro tiene que vencer la gran ilusión de la materia (Tauro).
El toro viene a representar los impulsos sexuales, irreflexivos, tentaciones, pasiones y demás elementos desordenados que existen y asedian en forma inclemente al iniciado.
Desprenderse del materialismo, la sexualidad, los estados de ira, el rencor, la testarudez, los celos y, al mismo tiempo, conseguir paciencia, tenacidad, constancia, fuerza, ternura, previsión y eficacia en cada uno de los ámbitos de la vida.
TRABAJO No. 3 RECOGIENDO LAS MANZANAS DE ORO DE LAS HESPÉRIDES.
“La mitología griega nos habla de un bello jardín, un huerto propiedad de la diosa Hera en un lejano rincón del occidente, quizás en las montañas de Arcadia, o en la cordillera de Atlas, o bien en una isla perdida. Este jardín contaba con un árbol de manzanas de oro que, según se decían, proporcionaban la inmortalidad; este era el Jardín de las Hespérides.
El árbol había sido un regalo de bodas de parte de Gea, la Tierra, para Hera, quien los plantó y encargó las hespérides, tres ninfas de Occidente (Hesperetusta, Egle y Eritia), hijas del titán Atlas, que cuidaran de todo el jardín. Pero el Jardín de las Hespérides se volvió algo muy preciado por Hera, tanto que no confiabas en las ninfas para protegerlo bien, quienes además desperdiciaban las manzanas, por lo que envió otra custodia: Ladón, un dragón de cien cabezas que enroscaba su cola en el tronco y que jamás dormía.
Cuando Heracles fue castigado por Hera y obligado a realizar los diez trabajos que le encomendara Euristeo, el trabajo número once fue robar las manzanas del Jardín de las Hespérides. Luego de una serie de travesías, Heracles se encontró con Atlas, el titán condenado a cargar el peso de los cielos, quien dijo saber dónde encontrar el jardín y que él mismo le traería las manzanas a cambio de sostener los cielos mientras tanto.
Atlas logró matar a Ladón, el dragón guardián, pero siguió viviendo en sus hijos, los árboles llamados dragos. Según el mito, la sangre que brotaba de las heridas de Ladón cayó sobre el jardín y cada gota dio vida a un dragón. Estos árboles-dragón tienen un grueso tronco del cual surge de pronto un racimo de ramas retorcidas que recuerdan las cien cabezas de Ladón.
Al regresar con los preciados frutos y no querer volver a su condena de cargar la cúpula celeste sobre sus hombros, Atlas dijo que él mismo llevaría las manzanas a Euristeo, pero Heracles le engañó pidiéndole que sujetase el cielo un momento para que pudiera colocarse su capa sobre los hombros, a lo que éste accedió. Entonces Heracles tomó las manzanas y se marchó.
Heracles fue el único que logró robar las manzanas doradas, aunque no haya sido él mismo quien las recogió. Tiempo después la diosa Atenea las devolvió al Jardín de las Hespérides”.
Al hablar de un jardín es notorio, que se habla de cierto espacio donde no habita cualquier individuo, la logia como tal acepta aquellos candidatos dispuestos a conocer y evolucionar por medio del conocimiento y aplicándolo a su vida para engrandecer su ser (alma y cuerpo).
El árbol del cual se habla en este mito, tiene una gran simbología; el árbol de la vida es mencionado en muchas culturas, ¿pero dentro de la masonería, qué nos enseña?, El árbol de la vida propio, es aquel cuyo individuo ha logrado enriquecer su espíritu controlando o equilibrando la balanza de sus vicios y virtudes, la dualidad que se genera en el transitar del sol por la era de géminis, (cuando Hércules viaja por las tierras del norte, sur, poniente y oriente, puesto que es en este transitar la referencia cuando la tierra y el sol, en su movimiento de traslación pasa por la constelación de géminis), tomamos así la dualidad como los pares opuestos de la cuadricula blanca y negra, cuya enseñanza universal masónica es la de lo bueno y malo, la de conciencia e inconciencia, y la cual por bienestar del masón éste suele equilibrar las emociones y sobre resaltar la cuadricula blanca que puede representar la victoria de la luz sobre las tinieblas. El árbol es el conocimiento del bien y del mal, el árbol de la vida eterna.
Los frutos dorados, la recompensa del dominio y conocimiento del árbol que internamente está compuesto de elementos donde la energía de cada ser resalta al conocer las diferentes disciplinas para alcanzar la inmortalidad conociendo los principios de la vida y de la muerte, lo cual nos hace recordar el primer viaje a la tierra, donde se enciende el deseo por seguir avanzando a lo desconocido pero encontrando la respuesta a la duda filosófica mediante la investigación.
El masón debe ser astuto, dinámico, ágil, inteligente, recto, capaz de tomar las decisiones pertinentes para obtener lo que realmente busca e intelectual, tal cual tan bondadoso con sus HH:. MM:., como Hércules lo fue con Atlas, pero tan dudoso como para descubrir las intenciones de los que reinan el mundo profano, ya que él con su sentido intuitivo hizo que Atlas regresara a su trabajo original de sostener los cielos y Hércules saliera victorioso con su trabajo.
TRABAJO No. 4 LA CAPTURA DE LA GAMA O CIERVA.
Para este trabajo Hércules debía capturar a una cierva para llevarla viva a Micenas y entregarla a Euristeo. La Cierva de Cerinea tenía pezuñas de bronce y cornamenta de oro, estaba consagrada por Artemisa a la Diosa Hera, ya que era una de las cinco ciervas que la diosa había intentado capturar para engancharlas a su carro y había sido la única que había logrado escapar. La cierva era muy veloz y uno de sus dones es que era considerada infatigable, por lo que no le resultaría fácil a Hércules atraparla: la persiguió día y noche sin descanso durante 1 año. La persiguió por montañas y valles de toda Grecia, hasta que al final le disparó una flecha sin veneno, en el momento en que la cierva estaba abrevando en un río. La flecha se clavó entre el tendón y el hueso de sus patas delanteras, que quedaron ensartadas, sin derramar una sola gota de sangre. Cuando tropezó y cayó, Hércules la apresó, le extrajo la flecha y se la llevó a Euristeo sobre los hombros. Durante este viaje de retorno con la cierva a cuestas, se encuentra Hércules con Apolo y Artemisa; la cual le echa en cara su intento de dar muerte a un animal que le estaba consagrado, e intenta, a su vez, arrebatárselo a Hércules; pero éste se disculpa comentando la necesidad en que se encuentra de obedecer a Euristeo, con lo que la diosa calma su ira y le permite llevársela, Artemisa se habría enfurecido si Hércules hubiera dañado a su cierva y, además, lo perdonó debido a su certero flechazo. Después, Euristeo liberó a la cierva.
Este cuarto trabajo de Hércules está conectado con el cuarto signo del zodíaco: Cáncer el cual es sensible y vulnerable en su interior, aunque en el exterior da la impresión de ser impenetrable, seguro de sí mismo y tenaz. Pone de manifiesto la necesidad de alimentar nuevas posibilidades para cambiar y crecer. El cambio requiere un cierto tiempo de evolución y con frecuencia se debe hacer balance de la situación y desviar la atención hacia el interior. Hércules debe aprender a usar el intelecto a través de ponerse en relación con el mundo de las ideas humanas y de la investigación. Debe aprender a llevar esa capacidad y transformarla en intuición para llegar a conocer las cosas del espíritu y de las realidades espirituales que ni el instinto, ni el intelecto pueden revelarle. El reto consiste en trabajar para poder unir los tres aspectos de la naturaleza del hombre: El instinto, la intuición y el intelecto.
Para pasar el Portal de Cáncer hay que haber pasado antes por el estado de conocimiento animal hasta llegar al humano. Se trata de un proceso inevitable, subconsciente, potencial y ordenado por las leyes naturales. Más adelante en la evolución, habrá que pasar el Portal de Capricornio. Pero a éste se entra mediante la iniciación, que es siempre un proceso voluntario, libre y poderoso. Cáncer, pues, supone la conciencia del conjunto, de la masa, el espíritu colectivo, mientras que Capricornio representa al grupo, al espíritu Universal. En Aries y en Tauro, percibimos los mundos de los contactos físicos y de las emociones; en Géminis, el mundo de las ideas convirtiéndonos en humanos. Tenemos, pues, ya instinto e inteligencia. Entonces se nos indica, mediante una iluminación momentánea, que hay más mundos que descubrir y conocer.
Cáncer representa la mente subconsciente, la imaginación colectiva y el instinto. El hombre no evolucionado está inmerso en la masa. El aspirante, en cambio, debe elevarse por encima de la masa, a la que le suma el instinto, y empieza a desarrollar la intuición. Los términos instinto, intelecto e intuición son tres distintos modos de conocimiento. El instinto es la conciencia de la materia y la vida. Por eso Artemisa que es la diosa que gobierna la forma material, le reclamaba a Hércules por la cierva. Pero el hombre es racional, sabe analizar y posee una mente y esa nueva capacidad de percepción de un mundo nuevo, es lo que lo diferencia del animal que era, y le ofrece un nuevo campo de conocimiento y experiencia. Y el instinto se transforma en intelecto. El primero le informa del mundo físico y de las emociones que genera y el otro pone a su alcance el mundo de las ideas y lo hace humano.
TRABAJO No. 5 MATANDO AL LEÓN DE NEMEA.
El león de nemea, es un monstruo hijo de ortro y nieto de tifón, su madre es equidna y es medio hermano de la esfinge de tebas, hera lo educó y lo situó en la región de nemea, donde asolaba y aterrorizaba al país, devorando tanto a sus habitantes como a su ganado, este león tenía por guarida una caverna con dos accesos, heracles al localizarlo comenzó su ataque disparando flechas y trazando su espada, pero sin resultado alguno, percatándose entonces que la única manera en la cual podía lograr su objetivo era perseguir al león en círculos cada vez más estrechos hasta acorralarlo en su cueva, procediendo a hacer esto, eventualmente le siguió la pista hasta su guarida, entonces amenazándolo con una maza, le obligó a entrar en la cueva cerrando una de las entradas, colocándolo de inmediato entre sus brazos asfixiándolo hasta conseguir la muerte de la fiera, heracles procedió a despellejar al fiero león con sus propias garras, pues ni el fuego ni el hierro podían rasgar la piel del león, al terminar, se revistió con ella, sirviéndose de la cabeza como casco ocultando su cabello amarillo en las enormes y aterradoras mandíbulas leoninas y de la piel como capa.
Este trabajo es quizá, conjuntamente con su enfrentamiento con la espantosa hidra de lerna, es el más famoso de los trabajos de hércules, estando asociado con el signo zodiacal aries el cual representa el inicio de todos los ciclos y con el signo zodiacal leo y sus cualidades son: independencia y autonomía, pues así como cáncer representa la conquista del espacio interior, leo consolida y estabiliza la forma como estructura independiente y autónoma, la culminación de este trabajo representa la integración de la personalidad y su estabilización como una poderosa herramienta para el trabajo del alma, pues si la personalidad permanece desintegrada e incoherente, moviéndose en todas direcciones, estando atada a sus propios impulsos y los estímulos del exterior, ningún contacto con el alma puede ser establecido y apenas si será un medio ineficaz de las fuerzas interiores y exteriores que a través de ella circulan.
La personalidad necesita establecerse como entidad autónoma, en términos generales, podemos comparar el trabajo hecho de aries a cáncer con la primera etapa del desarrollo anteriormente expuesto, la etapa del desarrollo del ego, mientras que le etapa que arranca con leo y culmina con escorpio estará asociada con la etapa de estabilización del mismo; luego entonces, en este trabajo de heracles, se establece firmemente como héroe, de hecho, dada la importancia del mismo, es que muchos mitógrafos lo colocan en primer lugar, seguido por el trabajo en el pantano de lerna, heracles ha dominado al león, símbolo de su indomable y poderosa personalidad, ahora está listo para actuar en el mundo con fuerza, voluntad y dominio de sí, ajustando su voluntad a un designio más grande que lo impulsa en su carrera como discípulo y servidor de la humanidad.
TRABAJO No. 6 APODERÁNDOSE DEL CINTURÓN DE HIPÓLITA.
Este trabajo encomendado a Hércules, el cual consiste en robar el cinturón de Hipólita, podemos interpretar a Hércules dado que es mitad Dios y mitad ser humano como a nosotros mismos, toda vez de que el G.: A.: D.: U.: vive dentro de nosotros mismos y a su vez somos mortales y falibles, tal y como sucedió con Hércules, al momento de realizar el trabajo que le fue encomendado, ya que Hipólita al enterarse de que Hércules llegaría a ella con el propósito de obtener su cinturón, le dio instrucciones a las amazonas que la rodeaban de entregar el cinturón en forma pacífica, es decir, ofrecérselo a Hércules como símbolo de unión y amor, sin embargo Hércules denoto su lado humano y dejo salir el vicio que tenía consigo cegándose por la soberbia y la ira a fin de cumplir con el trabajo encomendado, procediendo a matar a Hipólita para apoderarse del cinturón; una vez hecho lo anterior lo presento ante el Maestro que lo vigilaba y este le hablo para cuestionarle de la siguiente manera: hijo mío, ¿ por qué matar lo que se necesita, está cercano y es querido.? Hércules se encontraba horrorizado por lo que había hecho, denotando el remordimiento humano cuando se es víctima de las pasiones y se actúa con instinto y no con la mente fría y el amor que debe prevalecer en todos nuestros actos.
Posteriormente hércules se dirige hacia las costas, en donde ve a un monstruo del abismo sosteniendo entre sus mandíbulas a Hesione quien gritaba desesperadamente hacia el cielo y herían los oídos de hércules, en este momento se simboliza al Dios que llevamos dentro, lanzándose hércules en su ayuda, pero ya era demasiado tarde, ya que el monstruo trago en su garganta a la desesperada Hesione, procediendo hércules a ir tras el monstruo y cumpliendo una máxima divina el hecho de olvidarse de sí mismo y entregarse a los demás, pudo llegar hasta la bestia, donde al tenerla de frente y emitir un fuerte rugido, inmediatamente Hércules entro en sus fauces y llego hasta las entrañas de la bestia donde pudo localizar a Hesione, sosteniéndola con su brazo izquierdo y con su espada, se abrió camino de entre la oscuridad de las entrañas de la bestia, hacia la luz exterior pudiendo rescatarla de la muerte, simbólicamente representa el acto de amor, de salir de la ignorancia que es la oscuridad de las entrañas de la bestia, hacia la verdad y el conocimiento de la luz divida.
Por tanto, después de haber cometido un error de muerte, Hércules lo corrigió con un acto de amor y vida, logrando así cumplir con el trabajo encomendado, encomendándole reflexionar sobre los caminos de la vida.
TRABAJO No. 7 LA CAPTURA DEL JABALI DE ERIMANTO.
En Arcadia, en la montaña de Erimanto, moraba un jabalí colosal, terror de los rebaños y cazadores de la zona. Hércules debía capturar al animal y llevarlo ante Euristeo. Ya de camino, se encuentra con Folo, un amigo Centauro. Éste le invita a festejar y beber vino en grandes cantidades junto a Quirón, otro sabio Centauro, haciendo que Hércules olvide su trabajo. En estado de embriaguez y ante la llegada de otros Centauros, se genera una gran discusión y sin tener noción de su estado hiere con una flecha impregnada con el veneno de la Hidra, a Quirón. Esto le produjo un daño incurable dado que era inmortal, sufriendo grandes dolores. Al final prefirió morir, no sin antes pedirle a Zeus cambiar su naturaleza con la de Prometeo, evitándole el sufrimiento, cuando estaba encadenado. Hércules huyó a las montañas entonces, y reanudó su trabajo. Hércules obligó al jabalí a salir de su refugio y lo persiguió por las montañas nevadas. El jabalí cayó extenuado por el cansancio y se despeñó por un barranco nevado. Entonces lo llevó sobre sus hombros hasta Micenas.
Este trabajo está conectado con el séptimo signo del zodíaco: Libra, ya que es la unión, la tranquilidad, el equilibrio, la armonía, el espíritu reconciliador. Es el idealista incapaz de vivir sólo.
A medida que avanza la vida, es necesario seguir progresando sin perder de vista los propósitos. Se tendrán más posibilidades de alcanzarlos si se establecen vínculos amistosos. Antes que Hércules capturara al jabalí de Erimanto, se sentó a la mesa de Folo y bebió con él y con Quirón. En este momento el alma de la jovialidad busca y encuentra placer. Los vapores del placer se deben disipar antes que la tarea mayor del autodominio ( la captura de jabalí) sea emprendida. La búsqueda del placer es necesaria para el desarrollo del alma, ya que sin una tragedia (la muerte de Quirón), los potenciales de equilibrio permanecen latentes sin desarrollarse.
TRABAJO No. 8 DESTRUYENDO LA HIDRA DE LERNA.
Continuando con los trabajos de hércules, hemos llegado al trabajo ocho, para lo cual quisiera comenzar narrando dicha azaña; lo mismo que el león de nemea, la hidra de lerna es un monstruo hijo de equidna y cuyo padre es tifón, fue criada por hera en el pantano de lerna, esta hidra es representada como una serpiente de varias cabezas, cuyo número varía desde cinco, seis, nueve o quizá más, el vapor que salía de sus fauces era sumamente mortal hasta el punto de que quienquiera que se acercase, incluso mientras el monstruo dormía, moría inevitablemente, esta hidra también devastaba las cosechas y los ganados de los pobladores, el estancado pantano de lerna era una mancha que desalentaba a todos los que llegaban a sus confines, su hedor contaminaba toda la atmósfera en un espacio de varios kilómetros; cuando heracles se aproximó, tuvo que detenerse pues sólo el olor casi lo venció, la arena movediza era un peligro más de aquel pantano, finalmente encontró la guarida donde se encontraba la monstruosa bestia dentro de una caverna donde reinaba perpetua noche, la hidra estaba oculta de día y de noche heracles rondaba el traicionero pantano esperando el momento propicio en que la bestia saliera, el monstruo permanecía dentro de su fétida guarida, para combatirla, heracles recurrió a flechas encendidas, la hidra emergió con sus nueve cabezas exhalando llamaradas, su escamosa cola azotaba furiosamente el agua y el barro salpicando a heracles, el monstruo se levantó, era una cosa de tal fealdad que parecía como si hubiera sido hecha con los más impuros pensamientos concebidos desde el comienzo del tiempo, la hidra se abalanzó sobre heracles y buscó enrollarse alrededor de sus pies, el se apartó y le dio un golpe de tal fuerza que una de sus cabezas fue inmediatamente trozada, cortaba las cabezas con ayuda de una especie de espada, ayudándole en esta hazaña su sobrino yolao, pues para impedir que de cada cabeza que cortara surgiera otra, le pidió a éste que incendiara el bosque cercano y que con auxilio de los tizones quemara las cabezas heridas, imposibilitando así que la carne se reprodujese, sin embargo, conforme cada cabeza caía, si no era rápidamente cauterizada la herida, dos crecían en su lugar, una y otra vez heracles atacó al furioso monstruo pero con cada asalto se volvía más fuerte, no más débil; luego entonces hércules se acordó que su maestro le había dicho, “nos elevamos arrodillándonos” y arrojando a un lado su arma, hércules se arrodilló, agarró a la hidra con sus manos desnudas y la levantó al aire, suspendida a lo alto la bestia, su fuerza disminuyó, de rodillas entonces, él sostuvo a la hidra alto por encima suyo para que el aire y la luz purificadoras pudieran tener su esperado efecto, el monstruo, fuerte en la oscuridad y el pantanoso barro, pronto perdió su poder cuando los rayos del sol y el contacto del viento cayeron sobre él, más y más desfallecida se hizo su lucha hasta que fue vencida, las nueve cabezas se inclinaron, luego, con jadeantes bocas y vidriosos ojos cayeron flojamente hacia adelante, pero sólo cuando ellas yacían sin vida, hércules percibió la mística cabeza que era inmortal, entonces la tomo y cortó la cabeza inmortal de la hidra enterrándola en lo profundo del pantano.
Este trabajo está asociado con escorpión y su cualidad, la muerte de la individualidad en busca de la totalidad, en esta trabajo escorpio permite dentro del gran ciclo de desarrollo de la conciencia, la muerte del “sí-mismo” como absoluto, al mismo tiempo que como eco de la unidad original existente durante el período de piscis y manifestada como tendencia heredada en el período de cáncer, se busca el retorno a la unidad a través de la fusión con ese otro, ésta búsqueda de la fusión de los polos opuestos, de la fusión de “mí” y “el otro”, acentuada en escorpio, es lo que lo asocia con la sexualidad y sus impulsos, el deseo, expresado como la búsqueda insaciable en sí mismo del otro, la búsqueda del otro en pro de la complejidad, la psiquis busca un tanto compulsivamente la unión con el otro, al ya haber trascendido la etapa de entrenamiento del ego, la personalidad intuye que no puede más seguir conduciéndose sólo y anhela la unión con el alma, el reconocimiento del otro nos permite ahora anhelar profundamente su encuentro y la fusión que nos devuelva la unidad perdida que existió en piscis, previamente al inicio de todo el ciclo, para ello, la personalidad debe trabajar con el deseo, transformándolo desde sus aspectos más burdos hasta el profundo anhelo representado por la unión con lo infinito, son nueve las cabezas de la hidra y una inmortal, como el deseo mismo, también se asocia dicha tarea asignada a hércules ya que cada cabeza de la hidra representa uno de los problemas que acosan a la persona valerosa que busca lograr el dominio de sí misma, tres de estas cabezas simbolizan los apetitos asociados con el deseo, la comodidad y el dinero, el segundo grupo de tres concierne a las pasiones del temor, el odio y el deseo de poder y las últimas tres cabezas representan los vicios de la mente no iluminada: el orgullo, el separatismo y la crueldad.
No es sino hasta que heracles puede humildemente hacer a un lado su ego, su personalidad fuertemente estructurada y capaz, cuando finalmente puede levantar a lo alto a la hidra, para exponerla a la luz del alma y así culminar las duras pruebas de trascender los restos de su propio deseo, egoísmo, vanidad y necesidad de identidad separada, cuestiones que como masones debemos combatir para desbastar y pulir nuestra piedra en bruto, aplicando cabalmente todo lo bueno que hay en nosotros en beneficio de la humanidad misma.
TRABAJO No. 9 MATANDO LAS AVES DE ESTINFALE.
En la mitología griega, Estínfalo fue un rey de Arcadia. Era hijo de Élato y cuando éste murió Estínfalo y su hermano Épito tomaron el trono de Azania que era un gran territorio en la antigua Grecia. Los pájaros que habitaban el lago Estínfalo eran carnívoros y tenían pico, garras y alas de bronce. Además sus excrementos eran venenosos y por ello arruinaban los cultivos. Por tal motivo el sexto trabajo de Heracles era acabar con aquellas aves que parecían inmortales por la magnitud y cantidad que había de esta especie, aparte que Heracles solo contaba con flechas que parecían no ser suficientes para todos los pajaros, cuando todo parecía perdido obtuvo ayuda de Atenea, quien le otorgó un cascabel de bronce y le dijo que fuese a una montaña elevada y lo hiciera sonar, en cuanto Heracles realizo esto los pájaros que no habían sido alcanzados por las flechas huyeron y fueron encontrados y exterminados años después cerca del Mar Muerto por los Argonautas.
En diferentes literaturas dogmáticas se presentan males arraigados por criaturas divinas que hacen complicado el andar para los seres humanos, lo más semejante a ésta historia podría ser las 10 plagas que cayeron en el pueblo egipcio. Ya analizando la simbología oculta, podemos observar que los pájaros representan un castigo por parte de los dioses hacia la población, esto por varias suposiciones ya sea por no rendir culto adecuadamente a los dioses, o por realizar acciones que atenten contra las buenas costumbres. Ahora bien si se compara la historia de Heracles con la de Moisés podremos ver otra semejanza que se puntualiza en la ayuda de parte de una divinidad para salir adelante, a Heracles le brindo el apoyo Atenea, que le proporcionó un instrumento para acabar con todos los pájaros.
También cabe mencionar que existe una relación a nivel astronómico que involucra a un signo del zodiaco, ya que cuando el Sol llega a la constelación de Sagitario, otro grupo de constelaciones denominadas Avis, se llega a ver. Esta constelación representa a un grupo de aproximadamente seis aves que huyen de la flecha de sagitario. A nivel simbólico, hace referencia a Heracles que dispara sus flechas a los pájaros del Lago Estínfalo.
Este trabajo de Hércules lo puedo atribuir a que los pájaros son equiparados con los vicios e imperfecciones que tenemos en la vida profana , ya que se van arraigando cotidianamente a uno mismo y se necesita de mucha voluntad para irlos desapareciendo, las flechas de Heracles simbolizan la fuerza de voluntad que sale disparada de la mente para combatir toda clase de defectos, y a pesar de que parezca imposible acabar con todos, debemos ir acabando poco a poco con éstos, la ayuda que Atenea le ofrece a Heracles es símbolo de la fraternidad que encontramos en la logia ya que un hermano nunca te dejara caminar solo y a pesar de las complicaciones y lo turbio que pudiera ser el sendero, contamos con el apoyo incondicional de los hermanos.
TRABAJO No. 10 MATANDO A CERBERO, GUARDIÁN DE HADES.
El significado de este trabajo viene a ser la representación de la fuerza y la sabiduría probadas por las pasiones y los vicios, Hércules habiendo adquirido estas facultades, al descender al inframundo debe sortear diversas vicisitudes debe sortear la muerte para buscar la inmortalidad que en figura de Prometeo quien habiéndose robado el fuego celeste o la inteligencia suprema fue destinado al hades es decir fue regresado a un estado de miseria o estado inferior, símbolo de lucha en contra de la esclavitud puesto que en su misión es ir y rescatar alguien al que esta encadenado y siendo prisionero, su enseñanza es ser libertador para conseguir la divinidad y recuperar la inteligencia o poder supremo.
Vemos la representación de Prometeo quien es el portador del fuego, como aquel quien teniendo todas las facultades ha ignorado el poder interno, es decir, alguien sumido en la decadencia, el sufrimiento y la oscuridad, Hércules figurativo del Sol, Luz, Fuerza y Sabiduría viene y desciende al Hades (Infierno) es decir son probadas, y hace retornar y restablecer mediante lucha, trabajo, perseverancia y decisión matando a quien simboliza al enemigo del hombre sus vicios y pasiones, el Cerbero de tres cabezas, es el guardián de lo que mantiene prisionero; haciendo libre a Prometeo después de haber destruido al enemigo, alegóricamente venciendo a ese enemigo para restablecer todas las facultades propias del hombre para recuperar la inmortalidad haciéndolo un símbolo de victoria y de dominio del poder interno.
Hércules el iniciado teniendo la Fuerza y la Sabiduría es el emblema del primer grado de la masonería representada en la palabra sagrada, en el primer tramo de la escalera a oriente, el aprendiz de masón representa a Hércules que con sus mismos elementos iniciáticos obteniendo las facultades y combatiendo a los enemigos la muerte, el guardián cerbero se tiene por misión vencer la hipocresía, ambición y fanatismo que habitan dentro de sí y que juntas representan así los vicios más detestables de la humanidad, ya que estas le han sumergido en gran oscuridad, la Fuerza que debe poseer el aprendiz es para reformarse del estado de ignorancia a un estado de conocimiento y sabiduría para obtener la inmortalidad (Prometeo) quien esclavizado en el mundo inferior o yo inferior, con la Fuerza y la Sabiduría son las aptitudes del iniciado aprendiz de masón para lograr esta encomienda.
Al tratar de luchar contra estas cosas negativas representadas por Cerbero en el mundo interno, el yo inferior al que hay que descender para estar en el infierno propio y para vencer estos enemigos, es sin duda la hazaña más épica que el iniciado ha de sortear, el profano que al iniciarse se ha adentrado en la búsqueda de la luz y del fuego divino o celeste para alcanzar la divinidad en este sentido es el encontrar la Consciencia propia, para ser merecedor de tal distinción la Fuerza aplicada como valor, aptitud y facultades del aprendiz es el primer escalón hacia el Templo interno y la Sabiduría del conocimiento de sí mismo bien utilizada nos permitirá encontrar el YO SOY o la realización del ser, el YO SOY es la esencia misma del GADU.
Este trabajo de Hércules en el sentido más practico es la búsqueda y la lucha que con perseverancia al tener elevados ideales para el engrandecimiento de sí mismo este trabajo es la labor del aprendiz quien buscando el yo superior debe descender al infierno y matar a a quien lo mantiene prisionero y salir victorioso de él rescatando su esencia divina e inmortal, esclavizada en el yo inferior, este estado se ha de vencer con la Consciencia y se ha de desarrollar para que podamos alcanzar la divinidad que habita en nosotros mismos que se define en un estado interno de elevación hasta alcanzar la inmortalidad.
Esta alegoría viene a representar los más fieles principios de engrandecer al hombre y dignificarlo ya que como hombre libre se tiene un deber infalible de ser mejores como persona, como ser, y este trabajo debe ser ejemplo de la lucha incesante por querer rescatar nuestra divinidad, un ser evolucionado es quien cuya misión es la de buscar su progreso personal para adquirir un mayor poder interno.
Como aprendiz de masón se adquiere la gran responsabilidad de ser un hombre libre de prejuicios y virtuoso luchando siempre por ser ejemplo, todo empieza un uno mismo debemos trabajar como Hércules ese sol interno que a traviese los más recónditos mundos inferiores que nos mantiene sumidos en oscuridad e ignorancia y tenemos siempre la misión de vencer esos enemigos internos y como Prometeo en el hades o nuestra Conciencia sin desarrollar debemos rescatarla matando o erradicando para siempre a esos enemigos, para que la esencia de la divinidad sea salvada por la Luz y sea esta quien domine en nuestro interior para que se vea reflejada en el exterior, la introspección de nuestro ser y el análisis de nuestro YO debe de triunfar el superior y dominar al inferior, descender a lo más inferior es despojarnos de nuestras imperfecciones es ir a liberar la inmortalidad para que nos podamos reformar y podamos adquirir nuevamente la humanidad para encontrar la divinidad.
Aplicado en uno mismo como constructores aquí viene a ser el resurgimiento el darnos cuenta de que somos perfectibles que para regresar al gran logos, y liberando al portador del fuego celeste que es nuestra inteligencia se alcanzara la conciencia para que podamos ejercer un dominio propio de nuestro ser para alcanzar la unión con el GADU y solo eliminando eso que nos aprisiona se podrá realizar este trabajo para que la luz triunfe sobre las tinieblas.
TRABAJO No. 11 LIMPIANDO LOS ESTABLOS DE AUGÍAS.
Euristeo impuso el trabajo de limpiar el establo en un solo día a Hércules con el fin de humillarle y ridiculizarle, ya que era tal la cantidad de excrementos acumulados (los establos de Augías jamás habían sido limpiados) que resultaba prácticamente imposible limpiarlos en un sólo día. Así el gran Hércules, vencedor de terribles monstruos y realizador de hazañas heroicas, caería humillado ante una tarea tan sucia.
Nadie esperaba que Hércules lo consiguiera, ya que en este trabajo la fuerza no le servía de nada, pero lo que hizo el astuto héroe fue desviar el cauce de los ríos Alfeo y Peneo, llevándolos a través de los establos por un canal que él mismo había cavado. Los ríos arrastraron toda la suciedad y Hércules, ante la sorpresa de todos, completó su quinto trabajo.
Hércules, recorre los doce signos zodiacales con sus 12 trabajos mismos que están plasmados en la cúpula celeste, así como en cada una de las columnas que están en las partes laterales del Templo. Astrológicamente, este trabajo de Hércules simboliza el signo de Acuario, por el agua de purifica la suciedad del ganado, este signo se simboliza con un ser cargando un cántaro de agua derramándolo.
A nivel numérico, los establos estaban sin cuidado y sucios por 30 años, por lo que el hedor era insoportable. Estos 30 años equivalen o simbolizan el 3, mismo que es el número de la personalidad: Mente, Naturaleza y Cuerpo físico y el 10 que es el número del Hombre.
Por lo que podemos deducir lo siguiente:
1.- El ganado, simboliza a nosotros, a los seres humanos
2.- La inmundicia o estiércol, simboliza la maldad de la gente o nuestros vicios mismos que no limpiamos y dejamos que se apropien de nosotros
3.- Los ríos, simbolizan el espíritu y el trabajo
4.- Hércules simboliza la presencia divina, el creador o nuestro GADU
Hércules, ataviado con el león de Nemea, en ese momento deja su estructura divina y se convierte en el hombre, y lo primero que hace es derribar los muros para que el agua pudiera correr a través de la porquería. Nosotros tenemos que derribar al igual nuestras “paredes” de egoísmo, de soberbia, de falta de humildad y dejar pasar la espiritualidad y purificarnos, debemos reconocer que nosotros, al igual que Augías, le damos gracias a los “ríos”, hay que dejar pasar la luz en nosotros, la luz de nuestro creador y dar las gracias.
Hay algo muy importante que le dicen a Hércules al terminar dicha empresa y es lo siguiente “Te has convertido en un servidor del mundo, avanzaste al retroceder, llegaste a la casa de la Luz por otro camino; ganaste TU LUZ para que la luz de otros pueda brillar”; Por consiguiente, que enseñanza nos deja este trabajo?. Ayudar a la limpieza del mundo sin esperar pago alguno ni reconocimientos, derribar nuestras barreras para obtener la luz con los ríos del conocimiento y la moral.
TRABAJO No. 12 CAPTURA DE LA MANADA COLORADA DE GERIÓN.
En esta última prueba, Hércules debía robar el rebaño rojo de Gerión, un monstruo con tres cabezas, tres torsos y tres pares de brazos, unidos por la cintura a tres pares de piernas. Hércules dio muerte a Gerión con una única flecha que atravesó los tres cuerpos. Encontramos en Gerión al número tres, la edad representativa del aprendiz y junto con ella numerosas triadas, pero que en nuestro caso, y tomando como plano de referencia en nuestra edad de aprendices, representa la parte física, emotiva y mental de cada uno de nosotros. A través del conocimiento de nosotros mismos y el trabajo en nuestra piedra en bruto, debemos lograr la unión “con una única flecha” de estos tres aspectos de nuestro ser.
CONCLUSIONES.
Antes de que diese comienzo a sus doce trabajos, los dioses lo pertrecharon para ello. Minerva le dio una túnica, símbolo de la vocación; Vulcano le dio una coraza de oro, que capacitaba al aspirante para emprender los doce trabajos y seguir adelante sin amedrentarse. De Neptuno, el dios de las aguas, recibió dos caballos, la naturaleza emocional, que representan la capacidad de ser arrebatado, ya sea por una línea de pensamiento o por una reacción emocional. Esta naturaleza emocional, cuando es usada correctamente y subordinada a los propósitos de Dios, es una de las más grandes posesiones que el discípulo tiene. Con la ayuda de Neptuno y los rápidos corceles, Hércules podía estar en contacto con la esfera más distante en la cual podían ser ejecutados sus trabajos. Equipado, por lo tanto, con vocación, energía espiritual y sensibilidad, el obsequio de una espada que vino de Mercurio, el mensajero de los dioses, es de profunda significación, pues la espada es el símbolo de la mente que divide en pedazos, separa y destruye. A través de su uso, Mercurio agrega a los otros dones conferidos a Hércules, el del análisis mental y la discriminación. Y Apolo, el mismo Dios Sol, se interesó por Hércules y le dio un arco de luz y una flecha, simbolizando la capacidad de ir rectamente a la meta; símbolo también de esa penetrante iluminación, que como una flecha de luz podría iluminar la oscuridad de su sendero cuando fuera necesario
Así equipado, Hércules permanece listo para el gran esfuerzo. Y cuando todos los dones habían sido concedidos y él permanecía con su divino equipo, tuvo lugar la más sorprendente reacción por su parte: se alejó un momento, y se internó en el bosque y regresó con un garrote que había cortado. Porque, aunque todos los presentes divinos eran muy hermosos y magníficos, él no sabía aún cómo usarlos y prefería abrirse camino sólo con lo que sabía y podía usar. Esto es lo que ocurre con el aprendiz, compañero y maestro masón en la logia, tiene el inmenso tesoro del conocimiento masónico, pero no siempre sabe como usarlo, por ello si no es un buen alumno del Segundo Vigilante, Primer vigilante y de los Maestros Masones con mas experiencia, caminara a tientas solo con sus conocimientos profanos intentando ser un mejor hombre, con dificultades en su formación, hasta que aprenda a usar las herramientas masónicas de manera apropiada.
Es por demás notorio, que en esta carrera masónica, tanto el aprendiz, como el compañero y el maestro, no concluyen por el mero conocimiento su arduo camino al perfeccionamiento personal y espiritual, ya que, utilizando de manera correcta las herramientas masónicas se puede alcanzar la luz de la sabiduría. Sin embargo, es de suma importancia mencionar que dichos conocimientos tienen que estar sustentados con los principios de la masonería, así como también de todos aquellos valores adquiridos en la vida profana los cuales, encaminados por ese guía llámese Gran Arquitecto del Universo, traerán consigo alcanzar el perfeccionamiento del ser humano en la vida profana.
Es por ello que se establece que todo individuo debe de pasar por un proceso, es decir, llámense trabajos internos o experiencias de la vida, así como las tuvo Hércules, pues tales trabajos, llevan consifo a demostrar el potencial más alto de cada individuo, y así alcanzar el perfeccionamiento y desarrollo espiritual.
Ahora, la historia de los 12 trabajos de Hércules es un relato de la mitología griega que no debe ser tomado de manera literal, pues está lleno de simbolismos que no aceptan una única interpretación. Se pueden encontrar múltiples interpretaciones sicológicas, esotéricas, zodiacales y solares a este relato de la mitología griega.
La esencia principal del relato de la mitología griega, es donde Hércules, después de cada episodio de locura por la cual atravesaba, se cuestionaba sobre todas y cada una de las acciones que realizaba, ya que estos actos eran realizados en un estado de inconsciencia, similar al estado en el que nos encontramos inmersos en el día a día en nuestras múltiples facetas de nuestra vida, sobre las cuales debemos de cuestionarnos, para saber si seremos capaces de trascender.
La característica principal de Hércules es la FUERZA. A través de esta FUERZA se representa la voluntad del A.: M.: para buscar la Virtud y la Instrucción, dando golpes decisivos a su piedra en bruto para devastar las imperfecciones y hacer que encaje en la construcción de la gran obra del templo a la virtud, que día a día nos debemos esforzar por construir, ya que emblemáticamente, esta característica es la primera que se encuentra en la escalinata que sube a oriente, marcando el inicio del ascenso en nuestra vida.
Como se menciona al inicio, Hercules inicia los trabajos como una forma de expiar su culpa, es el inicio de un proceso de purificación, de perfeccionamiento, que no hace alegoria mas que al inicio de un proceso iniciciatico, en el cual, a traves de su caminar, le va dando herramientas y va cosechando conocimiento de si mismo, de la vida y de mas herramientas que le ayudaran a utilizar su fuerza para superar las distintas pruebas que le son impuestas y lograr entonces perfeccionar su mente y espíritu y ganarse un lugar para poder trascender.
Podemos decir finalmente que Hércules es el único que nació mortal y que tuvo que aprender a conocerse a sí mismo para descubrir sus cualidades interiores y alcanzar la divinidad. Hércules es, entre los distintos héroes mitológicos, el que más se acerca al espíritu del A.: M.:, quien debe, con la fuerza aplicada al cincel y al mallete, enfrentar a sus demonios internos y controlar sus instintos y miedos irracionales, pasar por las pruebas de purificación, y liberar así a su piedra en bruto de los vicios y las pasiones, en una búsqueda constante y paciente de la Virtud y la Instrucción.
ES CUANTO.
FRATERNALMENTE: